En La Habana existe un lugar que nos acerca al Barrio Salvador a pesar de los 7.400 kilómetros que nos separan. Se trata de «La Quinta de los Molinos», otro gran pulmón verde de ciudad que comparte nombre con el nuestro y muchas curiosidades más.
La Quinta de los Molinos de Cuba se creó hace casi 200 años, siendo mandada construir como residencia de verano por un español, el Capitán General Miguel Tacón y Rosique, gobernador de Cuba durante 18 años. Por entonces, y al igual que el palacio de nuestra quinta servía de residencia al arquitecto Cort Botí, se construyó la «Casa de descanso de los Capitanes Generales», para servir de residencia a varios Capitanes Generales de la época del colonialismo español.
Entonces se la conocía como «Jardín de Tacón», en honor al General Miguel Tacón, o «Quinta de los Capitanes Generales». Pero, tras la Guerra de Idependencia y la derrota de España, su nombre derivó al de «Quinta de los Molinos», por la existencia de dos molinos del siglo XVII que se usaban para moler trigo, maíz y tabaco (el negocio del rapé florecía en Cuba por entonces).
Conoce la Quinta de los Molinos, un pedazo de verde dentro de la Habana. Antiguo Jardín Botánico de la ciudad. #ConoceCubahttps://t.co/kfgemFhyQ4 pic.twitter.com/phs9a0v0yu
— Norfi Carrodeguas (@NorfiCarrodegua) August 1, 2019
Al igual que sucedió en nuestro barrio, el terreno original de La Habana superaba con creces el actual territorio del jardín, reducido para otros fines, y también estuvo abandonado durante muchos años, pasando recientemente a ser propiedad de la Universidad de La Habana, época que reorientó su historia como jardín botánico.
Quinta de los Molinos, La Habana, paraíso natural en el centro de la ciudad. #nature #vida pic.twitter.com/SsM7w5mm4G
— Alejandro Sautie V (@AlejandroSautie) August 19, 2016
Recientemente restaurado, además de mantener su uso como jardín, hoy en día se ha convertido en una instalación cultural en la que niños y mayores realizan actividades relacionadas con la naturaleza y la educación medioambiental. Otro de sus atractivos es la numerosa cantidad de especies vegetales autóctonas, las fuentes, los bonsais, las aves, los reptiles, el mariposario, los estanques, senderos, áreas de descanso y los cocos.
La Quinta de los Molinos, #Habana c.1900 pic.twitter.com/buV3BSqCqu
— Camagüey (@Camaguey1514) December 20, 2021
Se llama «DE LOS MOLINOS» porque, tras la residencia de los Capitanes Generales de Cuba, corría potente la Zanja Real, canal que desviaba las aguas del caudaloso río Almendares para servir de abasto del precioso líquido a los habitantes de La Habana. Bueno, allí se alzaban varios molinos hidráulicos que servían para moler trigo, maíz y sobre todo tabaco, porque desde el siglo XVIII el negocio del rapé era floreciente en Cuba.
Muchas gracias Mario.
¡No conocíamos para nada esto! Nos ha encantado la información y que, de alguna forma, estemos unidos a Cuba también de esta forma