A partir de mayo, Madrid tendrá nuevos patinetes eléctricos. Con ellos, llegarán nuevos estacionamientos (para bicicletas y patinetes), así como cambios en el servicio que pretenden finalizar con los principales problemas que generan este tipo de vehículos en la ciudad:estacionamiento indebido y circulación por zonas no permitidas.
La primera novedad es que han sido autorizados tan solo tres operadores para prestar sus servicios en Madrid. Se trata de Dott, Lime y Tier Mobility, los cuales han obtenido la puntuación más alta en la valoración de los criterios de adjudicación de las autorizaciones de entre las diez ofertas que se presentaron al procedimiento. Estas autorizaciones tendrán un plazo de duración de tres años con posibles prórrogas por plazos de seis meses en atención a la evolución de la demanda.
El Ayuntamiento ha considerado que una fragmentación excesiva de las empresas supone un freno para la implantación efectiva de los patinetes compartidos. Para determinar este criterio se ha tenido en cuenta la experiencia de 17 ciudades. El modelo futuro se asemeja al de París y Londres.
Otra novedad será la reducción en un 40 % del número máximo de patinetes que pueden desplegarse por la ciudad, pasando de los 10.000 patinetes establecidos en las autorizaciones vigentes a los 6.000 patinetes a partir de mayo.
El límite viene determinado por la mitad de la capacidad de plazas en las reservas municipales de estacionamiento para bicicletas eléctricas en la fecha de la convocatoria, conforme a lo previsto en el artículo 85 de la Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS). No obstante, se establece la posibilidad de incrementar el número de autorizaciones en función de la demanda y el uso real de los patinetes eléctricos, procediéndose a una evaluación cada cuatro meses a través de un cuadro de mando de las empresas al que tendrá acceso el Ayuntamiento de Madrid.
Uno de los principales problemas del sistema actual de alquiler de patinetes es el estacionamiento indebido en lugares no habilitados. El nuevo modelo de autorizaciones deberá contar con los desarrollos tecnológicos en sus aplicaciones para obligar a aparcar a los clientes únicamente en las zonas habilitadas para ello, siempre en el distrito Centro y, en el resto de la ciudad, fuera de las mencionadas reservas siempre que no exista una plaza para motocicletas, ciclomotores, bicicletas y VMP a menos de 50 metros del punto de estacionamiento.
En la distribución habitual se agruparán un máximo de cuatro patinetes por punto y no se podrán ubicar en ámbitos de paradas de transporte público colectivo o de taxi, reservas para personas con movilidad reducida o sobre las tapas de registro o de servicio. Tampoco se permitirá en ningún caso iniciar o finalizar el trayecto en calles de prioridad peatonal ni en las aceras ni en espacios peatonales contiguos a parques históricos.
Todas las empresas adjudicadas se han comprometido a la retirada de vehículos aparcados incorrectamente o dañados en el plazo de una hora a partir de su detección.
Los vehículos son nuevos y disponen de luces, timbre y elementos reflectantes homologados conforme a la normativa vigente. Son de baterías extraíbles y cuentan con el certificado emitido por la DGT que garantiza el cumplimiento de las características técnicas.
Cada patinete cuenta con un sistema que permite la geolocalización y su identificación para poder integrarse en una plataforma multimodal, incluyendo a la de Madrid Mobility 360.
Las empresas adjudicadas incluirán un registro de estacionamiento mediante sus aplicaciones para que los usuarios puedan subir fotografías y la ubicación exacta del patinete al abandonar el servicio, de modo que sea posible verificar que el aparcamiento se ha producido conforme a la Ordenanza de Movilidad Sostenible. Además, tendrán la obligación de impartir cursos prácticos de circulación segura en patinete a lo largo de la duración de la autorización según su oferta y pondrán en marcha un plan de acción para dar a conocer a los usuarios la normativa y los criterios básicos de circulación en patinete eléctrico.
Los nuevos patinetes comenzarán a desplegarse el 2 de mayo, cuando las autorizaciones actuales pierdan su vigencia. Desde esa fecha, dispondrán de cinco días hábiles para desplegar al menos el 50 % de los patinetes autorizados. Por tanto, el día 9 de mayo la ciudad debería contar con, al menos, 3.000 nuevos patinetes desplegados.