Las ayudas para la eliminación de las calderas de gasóleo y estufas contaminantes de las terrazas se encuentran disponibles desde el 24 de febrero con un gasto inicial de 2 millones de euros ampliables a 1 millón más. El plazo de solicitud permanecerá abierto hasta el 20 de octubre para la línea de ayudas «terrazas sin emisiones» y hasta el 24 de noviembre para el resto de líneas de actuación.
El objetivo de esta convocatoria, la cuarta desde el año 2020, es contribuir a la reducción de las emisiones contaminantes a la atmósfera, fundamentalmente las de óxidos de nitrógeno, partículas y gases de efecto invernadero, así como fomentar sistemas de alta eficiencia energética.
Las ayudas se dividen en tres ámbitos:
- 1,8 millones de euros para sustituir las calderas de gasóleo por sistemas de alta eficiencia conectados a redes de suministro urbanas que eviten el transporte de combustible,
- 100.000 euros para sustituir instalaciones o aparatos de calefacción por combustión empleados en terrazas o quioscos de hostelería y restauración por otras instalaciones de generación de calor eléctrico sin emisiones locales,
- y 100.000 euros para cambiar generadores de calor que empleen combustibles fósiles en cualquier instalación térmica en edificios de uso residencial por bombas de calor de accionamiento eléctrico.
Para ser beneficiario de estas subvenciones, deberás realizar la renovación de los equipos en la ciudad de Madrid entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2023, solicitándolo a través de la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia) conforme a los formularios, procedimientos y plazos establecidos en este enlace.
En el caso de la línea de ayudas «terrazas sin emisiones», que podrán llegar a cubrir hasta el 50 % del coste de las nuevas instalaciones, solo serán subvencionables las actuaciones que se realicen en terrazas autorizadas con anterioridad a la entrada en vigor de la Ordenanza de Terrazas y Quioscos de Hostelería y Restauración 1/2022 del 25 de enero.
Desde el 1 de enero de 2022, las calderas de carbón están prohibidas en la ciudad por la Ordenanza de Calidad del Aire y Sostenibilidad.